
La primera cadena de Mediaset estrena nueva imagen corporativa basada en la simplicidad, uniformidad, claridad y sencillez.
Telecinco nació un 3 de marzo de 1990 y lo hacía con un logo formado por un 5 tridimensional en color dorado, que estaba acompañado por la palabra tele y por una margarita, presente en la mayoría de las empresas de Berlusconi.
En 1997 y tras una crisis de audiencia, Telecinco decide hacer un rebranding de la marca y elimina el dorado, la margarita y la palabra ‘tele’, colorea de azul el número 5, el cual va acompañado de un círculo rojo. A lo largo de estos 18 años, Mediaset ha modificado en varias ocasiones sus colores, sus formas, pero en la actualidad sigue siendo ese 5 acompañados de una bolita.
Ayer Mediaset sorprendía a todos anunciando un nuevo cambio, justo y como ya pasó en 1997, cuando la cadena se enfrenta al peor momento de su historia tras haber registrado su peor verano. Telecinco estrena nueva temporada el próximo lunes 2 de septiembre y con ella un lavado de cara que afecta directamente a su imagen, diseño y color. A continuación y usando la nota de prensa que nos facilitó Mediaset, os contamos en qué consisten estos cambios.
El logo del canal cobra todo el protagonismo, ganando en simplicidad, pero manteniendo su carácter moderno y dinámico y pasa a usar el blanco como color unificado y un círculo transparente en su interior en lugar de la esfera azul, que ya conocíamos. El logo ha servido de inspiración también para la creación de una nueva línea, estilos tipográficos personalizados y el uso de una nueva tonalidad azul corporativa para sus fondos.
Otra de las novedades es que, esa nueva tonalidad de azul, cambiará a partir de las 21:05 de la noche a un ‘modo nocturno’ y pasará a ser de una tonalidad más oscura que permiten una reducción de la fatiga visual y de la exposición a la luz, entre otros beneficios.
La nueva imagen de Telecinco incluye el estreno por primera vez en la televisión de una campaña de cortinillas protagonizada por los diferentes presentadores del canal y que se mostrará en movimiento y con efecto slow motion, que incrementa sustancialmente el impacto y la atención sobre ellos.
Jorge Javier Vázquez, Ana Rosa Quintana, Carlos Sobera, Ion Aramendi, Sandra Barneda, Carlos Franganillo, Emma García, Joaquín Prat, Carlos Latre, Ana Terradillos, Santi Acosta, Beatriz Archidona y Risto Mejide son los principales protagonistas de estas nuevas cortinillas.
Los cambios de Telecinco han sido basados en la simplicidad, uniformidad, claridad y sencillez, que son las claves que vertebran la nueva línea gráfica de la cadena, conceptos que han sido explicados de la siguiente manera:
- Simplicidad: la marca, las menciones a sus presentadores, programas y series y las citas con la audiencia se muestran de la manera más clara y simplificada posible.
- Uniformidad: la nueva identidad converge en un único estilo aplicado a todo el ecosistema de información que el canal ofrece en pantalla a los espectadores sobre su programación.
- Claridad y sencillez: las piezas, los textos, los gráficos y las imágenes de los presentadores se muestran con la máxima limpieza, sencillez y calidad en pantalla, huyendo de artificios.
En línea con el logo, se han reinterpretado todos los logotipos de los programas y series de la cadena, utilizando el blanco como color unificado para todos ellos. De este modo, se refuerza la simplicidad, la sencillez y la legibilidad para el espectador.
La forma limpia y circular del logo solo se verá momentáneamente modificada cuando sea necesario comunicar a los espectadores las calificaciones por edades de los contenidos y los servicios de accesibilidad disponibles.
Las nuevas tipografías usadas por la cadena son Harabara, utilizada en los títulos de los contenidos o en las menciones a los presentadores; y Montserrat, usada para citas, horarios y textos de menor tamaño.
El nuevo anagrama de Telecinco se inspira en la forma y ángulos de la parte superior del cinco del logo del canal, partiendo de una tipografía de base (sans serif) en minúscula y simplificando la C de ‘cinco’ para transmitir una sensación de mayor cercanía con el espectador.
Telecinco cambia para parecer más moderna y cercana, pero la verdad es que necesita mucho más que un rebranding para conseguir estos objetivos. Una marca no cambia simplemente con un lavado de cara externo, necesita cambios más sustanciales, cambios desde dentro, desde sus cimientos. Y puestos a cambiar, sería genial que Mediaset apostase por caras y talento nuevo en toda su infraestructura.
¿Y a ti qué te parecen estos cambios, te gusta la nueva “cara” de Telecinco?