MELER, el trío formado por Loren, Javi y Jonathan publican ‘Entre el amor y el desamor’ su esperado primer álbum.
MELER vuelve a tocar la fibra con un trabajo que, más que un disco, es un recorrido emocional de esos que se viven con auriculares y el volumen un poco más alto de lo habitual.
‘Entre el amor y el desamor’ llega como un proyecto redondo, cuidado y profundamente personal, donde el trío explora cada fase de una historia sentimental. Y no podemos negar que en La Parabólica sentimos este lanzamiento como algo especial: los chicos de MELER son amigos de esta casa, y celebrar sus logros se siente un poco como celebrar los de la familia.
Desde el primer segundo, el álbum muestra claramente su concepto: un trayecto dividido en dos mitades que dialogan entre sí. La primera parte está bañada en luz, ilusión y esa sensación de vértigo que sólo aparece cuando el amor empieza a crecer. La segunda, en cambio, se sumerge en el lado más real, imperfecto y a veces doloroso del desamor. Ambas se unen a través de un tema puente que marca la transición y que funciona casi como el capítulo central de una historia que todos vivimos alguna vez.
La producción mantiene ese sello tan característico del grupo: pop fresco, melodías contagiosas y letras que no necesitan disfrazarse para emocionar. Se nota el trabajo honesto, casi artesanal, de tres músicos que han aprendido a contar lo que sienten sin miedo a mostrar grietas. Hay energía, hay nostalgia, hay ternura… y hay verdad.
Las canciones dedicadas al amor desprenden esa emoción de primer mensaje, primer beso y primeras promesas. En cambio, la segunda parte del álbum apuesta por atmósferas más profundas, más introspectivas, con frases que resuenan porque todos hemos tenido que aprender a despedirnos sin saber del todo cómo hacerlo. El cierre del disco, especialmente, deja un sabor dulce y melancólico, como quien mira atrás y agradece incluso lo que dolió.
MELER no sólo entrega un disco: entrega un viaje en el que es imposible no reconocerse. Y quizá por eso funciona tan bien. Porque sus canciones hablan de nosotros, de lo que sentimos, de lo que perdimos y de lo que aún buscamos.
¿Estás list@ para escucharlo y sentirlo de principio a fin?








